San Gil se erige como joya histórica y turística en el corazón de Santander
Resumen
San Gil, la Capital Turística de Santander, celebra 336 años de historia. Fundada en 1689, su ubicación entre Bucaramanga y Bogotá la posiciona como un epicentro del turismo de aventura y cultural. Es conocida por su riqueza paisajística y legado histórico.
Generado por Inteliegenica Artifical (OpenAI)Celebración del onomástico 336 de “La Perla del Fonce”
Este municipio colombiano, enclavado sobre el eje vial entre Bucaramanga y Bogotá, ocupa un lugar privilegiado en el mapa nacional y es centro ineludible para el turismo de aventura.
Se presenta como el núcleo urbano más importante del sur del departamento y, en 2004, se le otorgó el título de Capital Turística de Santander, lo que selló su destino y afianzó su identidad vibrante.
La historia de San Gil se remonta al siglo XVI, cuando surgieron las primeras poblaciones en la región. En aquellos tiempos, la vida se regía por el comercio, la minería, la extracción de quina, el cultivo del tabaco, la arriería y el trueque.
Mientras algunos asentamientos se establecieron con el propósito de facilitar la labor de evangelización, San Gil se fundó exclusivamente por españoles. Estos primeros colonos sentaron las bases de una presencia que perduró y se reflejó en las antiguas vías, muchas de las cuales aún se utilizan para conectar comunidades y transportar mercancías.
Un acontecimiento crucial tuvo lugar el 6 de mayo de 1688, en aposentos del Carrizal. Un grupo de estancieros, vinculados a la doctrina del pueblo Guane, entregó su poder a favor de Francisco Díaz Sarmiento.

Cambió de Santa Cruz a San Gil
Dicho hecho llevó a la sustitución de Sarmiento por Leonardo Currea de Betancurt, quien asumió la responsabilidad de gestionar en la Real Audiencia las diligencias necesarias para fundar una villa.
El proyecto inicial contemplaba la creación de una villa en el territorio comprendido entre los ríos Sogamoso y Mochuelo, que se bautizaría como Santa Cruz.
La adición del nombre San Gil se hizo para rendir homenaje a Gil de Cabrera y Dávalos, presidente de la Real Audiencia de Santa Fe de Bogotá y así ganar su beneplácito en el proceso de colonización.
El 17 de marzo de 1689, día del onomástico de San Gil, Gil de Cabrera dictó el auto de fundación de la villa. Poco después, el 11 de mayo, la Real Audiencia emitió la carta que concedía la licencia para fundar la “Muy Noble y Leal Villa de Santa Cruz y San Gil de la Nueva Baeza” en la provincia de Guane.

Riqueza paisajística
Este episodio marcó un hito en la historia local, pues estableció de forma oficial la entidad que serviría de semilla para el crecimiento social, cultural y económico que se consolidaría con el paso de los años.
La ubicación geográfica de San Gil constituye otro de sus atributos. Se encuentra a 96 kilómetros de Bucaramanga, la capital del departamento, y a 327 kilómetros de Bogotá, la capital de la República.
Su situación geográfica permite el disfrute de paisajes variados y atractivos, lo que la convierte en un destino de interés tanto para el turismo de aventura como para el cultural.
El territorio del municipio abarca 149 kilómetros cuadrados y cuenta con un área total de 14.590 hectáreas, de las cuales el 2.45% comprenden el sector urbano y centro del municipio.
En este espacio se agrupan 56 barrios, que conforman una comunidad diversa y activa. San Gil limita al norte con los municipios de Villanueva y Curití, al oriente con Curití y Mogotes, al sur con el Valle de San José y Páramo, y al occidente, con Pinchote, Cabrera y Barichara.