Industria y agricultura jalonan la capacidad productiva de Santander
Resumen
Santander se consolida como líder económico para 2025 gracias a su industria y agricultura. La diversificación y puesta en marcha de proyectos de infraestructura y tecnología son claves en su estrategia de crecimiento sostenido.
Generado por Inteliegenica Artifical (OpenAI)
Activos los motores económicos en el departamento durante 2025
Santander se consolida como una región con amplias perspectivas económicas positivas para el año 2025, tras registrar un gran crecimiento, superior al promedio nacional durante el año 2024.
La industria santandereana evidencia una sólida capacidad para sostener el crecimiento. Sectores clave como textiles y confecciones, curtido de cuero y calzado, sustancias y productos químicos y alimentos y bebidas han sido determinantes en la generación de empleo y el aumento de la capacidad productiva.
Estos sectores, con resultados consistentes en 2024, se proyectan como motores esenciales para enfrentar los retos económicos del presente año, los cuales empiezan a entregar buenas cifras en el primer trimestre.
La diversificación de la producción industrial fortalece la estructura económica regional, permitiendo aprovechar las oportunidades de un entorno competitivo y en constante evolución.
La Refinería de Barrancabermeja juega un papel crucial en la actividad industrial de Santander. Esta planta, un importante contribuyente al Producto Interno Bruto (PIB) regional, mantuvo una carga de 221.600 barriles diarios, cifra similar a la de 2023.
Rendimiento superado
La relevancia de esta infraestructura radica en su capacidad para sostener la cadena de valor, a pesar de la disminución progresiva de la producción petrolera a nivel nacional.
No obstante, incidentes de seguridad en el último trimestre de 2024, causados por atentados al oleoducto Caño Limón Coveñas, redujeron en un 10,4% la disponibilidad de crudo liviano.
Esta situación representa un desafío para el sector, que enfrenta una tendencia decreciente en la producción de petróleo en el país, con implicaciones directas en la dinámica industrial.
Adicionalmente, otros sectores productivos contribuyeron a la consolidación de la economía regional. La producción de muebles y maderas, papel e imprenta, minerales no metálicos, productos metálicos y vehículos experimentó un crecimiento del 2,5% en 2024, con lo cual se superó el rendimiento del año anterior.
La capacidad de estos sectores para adaptarse a un entorno económico incierto demuestra la fortaleza estructural de la industria santandereana.
Fortaleza en el campo
La combinación de actividades diversificadas y la orientación hacia la innovación se reflejan en indicadores positivos que sustentan las proyecciones de crecimiento sostenido para el presente año.
El sector agropecuario se destaca como un componente esencial en la reactivación económica tanto a nivel nacional como regional. Con un crecimiento del 8% a nivel nacional durante 2024, el campo se posiciona como el tercer mayor contribuyente al PIB de Santander, solo superado por el comercio y la industria manufacturera.
La participación del sector agrícola, que alcanza aproximadamente el 15% en el departamento, impacta directamente en la balanza comercial y la generación de divisas.
La producción de alimentos perecederos experimentó un incremento significativo durante el tercer trimestre de 2024, impulsada por cultivos como limón Tahití, mandarina, naranja, plátano, tomate y café.
La alta calidad y diversidad de la producción agropecuaria permiten a Santander consolidarse en mercados nacionales e internacionales.
Modernización, tecnología y competitividad
La planificación estratégica del desarrollo regional contempla importantes proyectos de infraestructura que implicarán inversiones cercanas a los 1.4 billones de pesos.
Estos proyectos incluyen obras viales e infraestructura para minas y energía, elementos que impulsarán la modernización y la conectividad del departamento.
La apuesta por mejorar la red vial, fluvial y aérea tiene como objetivo facilitar el transporte de productos y personas, lo que fortalecerá la competitividad regional.
La inversión en infraestructura se presenta como una herramienta fundamental para dinamizar la economía y responder a las exigencias de un mercado cada vez más competitivo.
En tecnología, Santander avanza con dos proyectos que incorporan tecnología 5G. El proyecto Troncal del Magdalena 1, que conecta Puerto Salgar con Barrancabermeja, inició su construcción en noviembre del año anterior y presenta un avance del 0,12%.
Por otro lado, el proyecto Troncal del Magdalena 2, que une Sabana de Torres con Curumaní, comenzó en agosto de 2024 y ha alcanzado un progreso del 3,7%.
Estas iniciativas tecnológicas, sumadas a las inversiones en infraestructura, representan un hito la modernización de la conectividad de la región. El desarrollo de redes de comunicación de alta velocidad favorecerá la competitividad empresarial y potenciará nuevas oportunidades de negocio.
Orientación estratégica de empresarios
Los sectores industriales y agropecuarios han demostrado su capacidad para responder a las demandas del mercado, a la vez que aprovechan las inversiones en infraestructura y tecnología.
La acción decidida de las autoridades y la orientación estratégica de los empresarios han contribuido a establecer un modelo de desarrollo sostenible, enfocado en el fortalecimiento de la productividad y la generación de empleo de calidad.
La consolidación de estos sectores estratégicos refleja el compromiso de Santander con el progreso económico y social.
Las inversiones planificadas y los proyectos en ejecución aseguran un futuro donde la productividad, la competitividad y la estabilidad se convierten en ejes centrales de la economía regional.
Las autoridades departamentales y los actores económicos asumen el reto de impulsar un crecimiento que beneficie a toda la sociedad y fomente el desarrollo integral de la región.
El panorama para 2025 se presenta claro y fundamentado en datos verificados. La fortaleza de la industria y la solidez del sector agropecuario, en todo Santander, establecen la base para un crecimiento sostenible y ordenado.
La modernización de la infraestructura y el avance en proyectos tecnológicos refuerzan la visión de un departamento que es capaz de enfrentar los desafíos del contexto nacional.
