VIDEO. ¿Autocuidado o tortura? Así es la mañana del “hombre perfecto”
Resumen
Ashton Hall, influencer de fitness, viraliza una rutina matutina extrema que incluye técnicas inusuales de autocuidado masculino. Su video suma 99 millones de vistas en TikTok, representando una tendencia que mezcla disciplina y perfeccionamiento físico.
Generado por Inteliegenica Artifical (OpenAI)
Una nueva tendencia de autocuidado masculino se ha vuelto viral en redes sociales. El protagonista es Ashton Hall, un influencer de fitness que ha llevado su "morning routine" al extremo: despertarse a las 3:52 a. m., sumergir la cara en agua con gas y restregarse la piel con una cáscara de plátano son apenas algunos de los pasos de su rutina, que acumula más de 99 millones de visualizaciones en TikTok.
El video, difundido por la cuenta @tipsformenx en X/Twitter, ha desatado tanto admiración como burlas. En él, Hall se muestra cumpliendo una secuencia milimétrica de actividades: quitarse el mouth taping, asearse, hacer ejercicio en el balcón, leer por dos minutos, manifestar, ver videos, meter la cara en hielo y salir a entrenar. Al regresar, repite el baño de hielo, se unta la cáscara de plátano en el rostro y graba un podcast mientras le preparan el desayuno.
The morning routine pic.twitter.com/HLhpwpKib8
— Tips For Men - Fashion | Essentials | Luxury (@tipsformenx) March 20, 2025
Aunque a primera vista pueda parecer una parodia, la rutina responde a una tendencia creciente entre hombres jóvenes que buscan proyectar disciplina, éxito y perfección física. Inspirados por figuras del fitness, influencers y criptoemprendedores, muchos adoptan prácticas de autocuidado cada vez más estrictas, guiados por ideales estéticos y la presión de optimizar cada minuto del día.
Estas rutinas, que comenzaron a popularizarse entre mujeres en TikTok bajo el nombre de morning skincare routine, han evolucionado en versiones más intensas en el mundo masculino, alimentadas por fenómenos como el looksmaxxing, que promueve el perfeccionamiento físico a través del entrenamiento, la cirugía estética y el cuidado obsesivo de la imagen.