Increíble: capturan a impostor de odontólogo que aprendió a sacar muelas por medio de las redes sociales.
Resumen
En Havlíčkův Brod, un joven ejerció ilegalmente como odontólogo aprendiendo de TikTok. Durante 2 años, atendió con éxito engañando a sus pacientes y generando 185 mil dólares. Fue arrestado junto a sus cómplices, acusados de varios delitos asociados al fraude.
Generado por Inteliegenica Artifical (OpenAI)
Lo que parecía una historia sacada de un guion de ficción terminó siendo una realidad desconcertante en la ciudad de Havlíčkův Brod, al este de la República Checa. Un joven de 22 años fue arrestado luego de que las autoridades descubrieran que ejercía como odontólogo sin haber cursado estudios universitarios, ni contar con licencia o entrenamiento médico formal. Su principal fuente de aprendizaje: videos en redes sociales como TikTok.
Durante más de dos años, el joven atendió a decenas de pacientes desde un consultorio que montó junto a dos familiares, realizando extracciones dentales, aplicando anestesia y ofreciendo incluso tratamientos con prótesis dentales. El consultorio, que aparentaba ser una clínica dental legítima, logró operar sin ser detectado por las autoridades ni levantar sospechas de la mayoría de sus pacientes.
Según datos oficiales, el falso centro odontológico generó ganancias cercanas a los 185 mil dólares. El impacto de la noticia ha sido profundo en el país europeo, especialmente porque muchos de los pacientes creyeron estar en manos de un profesional calificado.
Lo más sorprendente del caso es la estructura organizada que sostenía el engaño. Mientras el joven se hacía pasar por dentista, una mujer de 50 años —pariente suya— desempeñaba el rol de asistente o enfermera, encargándose de los insumos médicos. Otro familiar, de 44 años, se ocupaba de fabricar las prótesis dentales que ofrecían como parte de sus servicios.
Durante 24 meses, el negocio operó sin mayores interferencias, y aún se desconoce si la investigación inició por una denuncia directa o si fue fruto de un seguimiento policial. Se presume que algunos pacientes pudieron haber notado irregularidades o resultados anómalos, lo que habría alertado a las autoridades.
Los tres implicados fueron detenidos a comienzos de este mes y posteriormente imputados por varios delitos, entre ellos: prestación ilegal de servicios médicos, lavado de dinero, tentativa de agresión, tráfico de sustancias y robo. La policía aún continúa recolectando testimonios de víctimas potenciales.
Este caso ha encendido alarmas sobre la facilidad con la que pueden montarse estructuras ilegales aprovechando la apariencia de legalidad y la desinformación, así como el peligro de confiar ciegamente en servicios que no cuentan con supervisión o acreditación oficial.