Una oportunidad para hablar del bienestar emocional de nuestras mascotas: el llamado de Gabrica en el Día del Perro
Resumen
En el Día del Perro, Gabrica llama la atención sobre la salud emocional canina, señalando que más del 70% de los perros padecen ansiedad. Se subraya la importancia de reconocer signos como comportamientos destructivos o vocalización excesiva para tomar medidas adecuadas.
Generado por Inteliegenica Artifical (OpenAI)En vísperas del Día del Perro, que se celebra este 21 de julio, la empresa Gabrica hace un llamado urgente a los cuidadores de mascotas para prestar atención a un aspecto fundamental pero muchas veces invisible: la salud emocional de sus perros. Con cifras alarmantes que revelan que más del 70 % de los perros presentan algún tipo de ansiedad, la compañía advierte sobre la necesidad de reconocer los signos de malestar psicológico y tomar medidas efectivas para mejorar su calidad de vida.
De acuerdo con el Dr. Michel Cardona, Gerente de Desarrollo Técnico de Gabrica, las conductas derivadas del estrés, el miedo o la ansiedad no son simples travesuras ni problemas de disciplina, sino síntomas de un desequilibrio emocional que requiere comprensión, acompañamiento y en algunos casos intervención profesional.
“Los perros también sufren las consecuencias de los cambios bruscos en la rutina, el estrés de sus cuidadores e incluso las alteraciones del entorno. La ansiedad por separación, por ejemplo, afecta a casi el 14 % de la población canina, aunque hay estudios que elevan esa cifra. Y en muchos hogares, este problema no se está abordando adecuadamente”, señaló Cardona.
¿Qué está afectando emocionalmente a nuestros perros?
El regreso a la presencialidad laboral tras la pandemia, las vacaciones de los tutores, mudanzas, la llegada de nuevas mascotas o bebés al hogar y hasta la simple ausencia prolongada pueden convertirse en detonantes de ansiedad para los perros. Además, existe una estrecha relación entre el estrés humano y el comportamiento animal.
Diversas investigaciones han demostrado que los perros pueden detectar, a través del olfato, cambios químicos en el cuerpo humano asociados al estrés con una precisión del 93 %. Este “contagio emocional” explica por qué muchos perros se tornan inquietos, vocalizan en exceso, tiemblan o desarrollan conductas destructivas en momentos en que sus cuidadores están atravesando situaciones difíciles.
Síntomas que no deben ser ignorados
Gabrica insiste en que los cuidadores deben estar atentos a señales como:
- Comportamiento destructivo (romper objetos, rasguñar puertas).
- Vocalización excesiva (ladridos constantes, aullidos).
- Eliminación inadecuada (orinar o defecar dentro del hogar).
- Cambios repentinos en el apetito o patrones de sueño.
- Comportamientos repetitivos, aislamiento o signos visibles de depresión.
Estas señales pueden ser interpretadas erróneamente como “mal comportamiento”, cuando en realidad son expresiones de ansiedad, miedo o confusión.
Soluciones prácticas para una vida más equilibrada
En respuesta a esta situación, Gabrica ofrece una serie de recomendaciones respaldadas por estudios científicos que pueden marcar la diferencia en el bienestar emocional de los perros:
- Contacto físico antes de salir de casa: caricias, palabras suaves y un tono relajado ayudan a reducir la frecuencia cardíaca del perro y lo preparan para la ausencia temporal.
- Entrenamiento gradual para la soledad: dejar al perro solo durante periodos cortos con refuerzos positivos puede mejorar su tolerancia al aislamiento.
- Uso de feromonas apaciguantes como Adaptil®: esta feromona sintética imita la liberada por la madre durante la lactancia y ha demostrado ser efectiva para reducir el estrés. Adaptil® está disponible en formatos como difusor, spray y collar, y ha sido validada por más de 20 estudios científicos y congresos internacionales. No tiene efectos sedantes ni interfiere con otros tratamientos.
- Ambiente enriquecido: el ejercicio diario, los juegos interactivos y la estimulación sensorial son fundamentales para mantener el equilibrio mental de los perros.
- Gestión del estrés humano: tomarse unos minutos para relajarse antes de interactuar con el perro puede reducir el impacto negativo del estrés de los cuidadores.
- Consulta profesional: si la ansiedad persiste o se agrava, es esencial acudir a un veterinario o etólogo para una evaluación individualizada.
Una celebración con propósito
Este Día del Perro no debe limitarse a dar premios, juguetes o compartir fotos en redes sociales. Es una oportunidad para reflexionar sobre el compromiso que implica cuidar verdaderamente de un ser vivo que depende emocionalmente de su entorno.
“Queremos que el Día del Perro no solo se celebre con sonrisas, sino con acciones concretas por su bienestar mental. Porque un perro feliz no es solo aquel que tiene comida y techo, sino también uno que se siente comprendido, seguro y amado”, concluyó el Dr. Michel Cardona.
Con este mensaje, Gabrica invita a los colombianos a ver a sus mascotas con una mirada más sensible y responsable, reconociendo que el bienestar emocional también es parte de una vida saludable.