Récord histórico en Nueva York: un Klimt alcanza los 236 millones de dólares en Sotheby’s
Resumen
El 'Retrato de Elisabeth Lederer' de Gustav Klimt alcanza los $236 millones en Sotheby’s, estableciéndose como la pieza de arte moderno más cara jamás subastada, superando récords previos y destacando en una subasta histórica en Nueva York.
Generado por Inteliegenica Artifical (OpenAI)
El mercado del arte volvió a sacudirse este martes en Nueva York tras la venta de Retrato de Elisabeth Lederer, de Gustav Klimt, una obra que alcanzó los 236 millones de dólares y se convirtió en la pieza de arte moderno más costosa jamás subastada. La puja, realizada en la sede de Sotheby’s, superó todos los pronósticos: partió de 130 millones y desencadenó una intensa disputa entre seis oferentes durante 20 minutos, hasta que un comprador anónimo se quedó con la obra.
El retrato, realizado entre 1914 y 1916, no solo impuso un récord para Klimt, sino también para Sotheby’s. La cifra superó ampliamente los 108 millones alcanzados en 2023 por Dame mit Fächer y dejó atrás los 157 millones recaudados por Nu couché de Amedeo Modigliani en 2018. Con este resultado, el cuadro también se posiciona como la segunda obra más cara vendida en subasta, únicamente por detrás del Salvator Mundi, de Leonardo da Vinci, que alcanzó los 450 millones en 2017.
La historia detrás del retrato contribuye a su relevancia. La pieza fue confiscada por los nazis antes de ser recuperada por la familia Lederer, cercanos al pintor. Elisabeth, hija de August y Serena Lederer, mantenía tal cercanía con Klimt que lo llamaba “tío”, y llegó incluso a decir a las autoridades nazis que el artista era su padre biológico para evitar persecuciones por su ascendencia judía. La obra fue adquirida finalmente en la década de 1980 por Leonard Lauder, heredero del emporio Estée Lauder, cuya colección llegó ahora al mercado.
La expectación alrededor de esta subasta fue notable. Miles de personas hicieron fila para ingresar a la nueva sede de Sotheby’s, un edificio brutalista diseñado por Marcel Breuer, donde este Klimt se convirtió en la gran atracción. Otros dos cuadros del pintor austríaco, Blumenwiese y Waldabhang bei Unterach am Attersee, también fueron protagonistas: se vendieron por 86 y 68 millones de dólares respectivamente, ambas obras presentadas por primera vez en una puja pública.
En total, Sotheby’s dispersó 24 piezas de la colección de Lauder, entre ellas trabajos de Munch, Matisse y Van Gogh, logrando una recaudación de 527 millones de dólares. De ese monto, 392 millones correspondieron únicamente a los tres Klimt y dos dibujos, consolidando la jornada como una de las más lucrativas en la historia reciente de la casa de subastas.