¿Para qué sirven las señales ‘PR’ en las carreteras de Colombia y por qué no deberías ignorarlas?
En las carreteras del país, donde no existen direcciones tan precisas como en las zonas urbanas, una señal de tránsito en particular puede ser la clave en caso de una emergencia: se trata de las identificadas con las letras “PR”, que significan Punto de Referencia.
Aunque a menudo pasan desapercibidas por los conductores, estas señales cumplen una función vital. Están diseñadas para ubicar de manera exacta al usuario dentro de una vía, facilitando la atención en caso de accidentes, fallas mecánicas u otras situaciones de riesgo. De acuerdo con el Ministerio de Transporte, a través de la Resolución 1885 de 2015, los puntos PR proporcionan dos datos fundamentales: el kilómetro exacto de la vía (en sentido vertical) y el tramo de carretera al que pertenece (en sentido horizontal). Este sistema está presente en autopistas y carreteras a nivel nacional.
El conteo de kilómetros en estas rutas comienza desde el punto más al sur o al occidente de cada vía, lo cual permite una organización lógica para la navegación y el mantenimiento de las carreteras. Así, tanto los conductores como los cuerpos de emergencia pueden saber con precisión dónde se encuentran y actuar de forma más eficiente.
Aunque no observar estas señales no conlleva multas, su función orientadora es esencial. No solo ayudan a ubicar incidentes en carretera, sino que permiten planificar mejor las paradas, calcular tiempos de llegada y recorrer trayectos desconocidos con mayor seguridad.
Además de las señales PR, otra señal importante que suele ser ignorada es la SR-36, también conocida como “retén”. Este aviso, que cuenta con fondo blanco, bordes rojos y una línea horizontal negra, indica la presencia de un puesto de control de tránsito, policía o aduana. Su correcta interpretación permite a los conductores prepararse para detenerse con antelación, evitando maniobras bruscas o accidentes.
Tanto las señales PR como la SR-36 demuestran que conocer y respetar la señalización en carretera no solo es una cuestión de legalidad, sino de seguridad para todos los actores viales.
