Miles de fieles viajarán a Roma para despedir al papa Francisco, en medio de un aumento sin precedentes en precios y demanda
Roma se convertirá en el epicentro del mundo católico tras el fallecimiento del papa Francisco, quien será despedido por miles de peregrinos que llegarán desde diferentes partes del mundo. Se prevé que la ciudad alcanzará su máxima capacidad hotelera y aeroportuaria en los próximos días, con precios de vuelos y alojamientos que aumentarán hasta un 75%.
Según anticiparán desde la Confederación Española de Agencias de Viajes (CEAV), miles de fieles españoles se trasladarán a la capital italiana, especialmente por la coincidencia con el Año Jubilar, que continuará celebrándose pese al deceso del pontífice. Las agencias de viaje trabajarán intensamente en la organización de peregrinaciones, lo que contribuirá al colapso de la oferta turística.
El Vaticano evaluará extender el horario de visitas a la Basílica de San Pedro, que acogerá el féretro de Francisco desde este miércoles y hasta el viernes. La exposición pública comenzará a las 11:00 horas locales y se prolongará inicialmente hasta las 19:00, aunque las autoridades eclesiásticas no descartarán permitir el ingreso más allá de la medianoche ante la afluencia masiva.
Iberia aumentará sus frecuencias a Roma hasta siete vuelos diarios y dejará abierta la posibilidad de incrementar su capacidad si la demanda continúa creciendo. En contraste, Air Europa no modificará por el momento su programación.
Plataformas como Booking mostrarán una disponibilidad inferior al 10% de alojamientos en la ciudad para el fin de semana. Los precios de los vuelos también subirán, en algunos casos, hasta un 60% según el día de viaje.
El funeral del papa Francisco se celebrará el sábado. Su ataúd será colocado frente a la tumba de San Pedro, en una ceremonia precedida por una procesión solemne desde la Casa Santa Marta, que marcará el inicio de su despedida final.
