La Normal Superior de Bucaramanga celebra 150 años de legado educativo y vocación
Resumen
La Escuela Normal Superior de Bucaramanga conmemora 150 años desde su fundación en 1875, destacándose como un referente en la formación de docentes en Colombia, superando crisis y adaptándose a cambios educativos, con un legado de identidad y compromiso educativo.
Generado por Inteliegenica Artifical (OpenAI)
La Escuela Normal Superior de Bucaramanga conmemora este viernes 2 de mayo 150 años de su fundación, una trayectoria marcada por la vocación de enseñar y el compromiso de formar generaciones de maestros. Fundada el 15 de abril de 1875 bajo la dirección de María de Jesús Páramo, esta institución pionera ha superado crisis, reformas y cierres temporales sin perder su esencia.
A lo largo de siglo y medio, la Normal Superior ha evolucionado desde la formación de institutoras hasta convertirse en un referente pedagógico en el nororiente colombiano, siendo reconocida como una de las seis Normales demostrativas del país en 1981. Ha enfrentado desafíos como la 'Guerra de Escuelas' y dificultades económicas que llevaron a cierres en 1920 y 1928, pero siempre ha resurgido, adaptándose a los cambios educativos sin perder su espíritu.
El lema "¡Normalista se es por siempre!" refleja el profundo sentido de identidad de sus más de 140 promociones y los 4 mil estudiantes actuales. La institución se trasladó a su sede actual en el barrio La Aurora en 1946, abrió sus puertas a la comunidad en los años 60, cerró su internado en 1987 y diversificó su oferta con un enfoque ambiental en 1993.
Hoy, la Normal Superior de Bucaramanga, la más antigua de la ciudad y la más grande del país en su tipo, continúa firme en su misión de educar con amor, excelencia y compromiso. Su historia, escrita por docentes, estudiantes y egresados, es un testimonio vivo de un legado educativo que perdura con esperanza.
