UTS lanza sistema de arrastre eléctrico modular para sillas de ruedas

Por: Andrés Felipe Quijano Silva / EL FRENTE

Las Unidades Tecnológicas de Santander presentaron un desarrollo que marca un antes y un después en la movilidad asistida del país: el primer sistema de arrastre eléctrico modular para sillas de ruedas diseñado, creado y probado desde los laboratorios de la institución. La iniciativa, concebida en el programa de Ingeniería Electromecánica, apunta a transformar la vida de personas que dependen de una silla de ruedas y que a diario enfrentan obstáculos como bordillos altos, baches en las vías, pendientes difíciles de sortear, trayectos extensos y, además, los elevados costos de los equipos motorizados existentes en el mercado nacional.

El punto de partida fue una necesidad evidente: la falta de dispositivos accesibles que faciliten la movilidad sin exigir esfuerzo excesivo en brazos y hombros, algo que suele incidir en lesiones y en el deterioro físico de los usuarios. Con ese diagnóstico, el docente MGE José Leonardo Gómez Ramírez propuso convertir un problema cotidiano en una oportunidad académica y social. Su reto se orientó a construir un sistema que integrara soluciones mecánicas, estructurales y electrónicas, basadas en el análisis ergonómico y en el estudio técnico de la realidad de quienes utilizan silla de ruedas.

A partir de esa idea, un grupo de estudiantes del programa —Astrid Margarita Herrera Sánchez, Marggy Lizbeth Cuadros Bautista, Ricardo Carreño García y José Luis Salazar Guedez— asumió el desafío desde cero. Con disciplina y un enfoque aplicado, realizaron los cálculos estructurales y eléctricos, seleccionaron el motor idóneo, eligieron la batería, diseñaron el chasis y los sistemas de soporte, definieron los periféricos y ejecutaron las pruebas necesarias para garantizar el correcto desempeño de todos los subsistemas. La herramienta de diseño 3D SOLIDWORKS fue clave para modelar el sistema, validar dimensiones y proyectar un uso cómodo y seguro.

Una solución pensada desde la ingeniería y el impacto social

El rector de las UTS, Omar Lengerke, destacó que la entrega de este sistema de arrastre eléctrico es una muestra concreta de cómo la ingeniería puede tener un impacto directo sobre la calidad de vida de la comunidad. “Como ingeniero que soy y como rector de las UTS estoy orgulloso de hacer entrega de este sistema que mejora la vida diaria de las personas. Disminuye la fatiga en brazos y hombros, reduce el riesgo de sobreesfuerzos y facilita actividades cotidianas como ir al trabajo, estudiar, hacer diligencias o participar en espacios recreativos”, afirmó.

Para Lengerke, este tipo de iniciativas reafirman que la acreditación de Alta Calidad de la institución no es un sello formal, sino un compromiso con el desarrollo regional. “Es una satisfacción ver que desde cada uno de los laboratorios de la institución se materializan proyectos para favorecer a los santandereanos y por supuesto a los colombianos. Para los docentes, estudiantes, egresados y comunidad uteísta este es un logro que ratifica por qué somos una institución acreditada en Alta Calidad”, agregó.

La innovación no se limita al aspecto técnico. Según explicó el docente líder del proyecto, el sistema introduce mejoras que no suelen estar integradas en los kits comerciales básicos ni en soluciones improvisadas que muchas personas fabrican artesanalmente por necesidad. Una de las mayores fortalezas es su diseño modular y adaptable, que permite ajustar el dispositivo a distintos tipos de sillas de ruedas sin afectar estabilidad o ergonomía. Esto lo convierte en una solución flexible, accesible y potencialmente escalable a gran escala.

Un diseño completo, seguro y adaptable a la realidad urbana

El sistema está equipado con un conjunto de elementos que buscan aumentar la seguridad del usuario y mejorar su interacción con el entorno urbano. Incluye iluminación frontal, trasera y direccionales, lo que permite que la persona sea visible en entornos con poca luz y evita riesgos en vías compartidas con peatones, ciclistas o vehículos. A ello se suma una señal acústica integrada y una alarma de reversa independiente, que ofrece avisos auditivos claros durante maniobras rápidas o cuando hay poca visibilidad.

Otra de las características destacadas es la distribución ergonómica de los mandos en el manubrio. El usuario puede controlar luces, pito, direccionales y otros comandos sin soltar el agarre principal, lo que incrementa la seguridad y permite una conducción más estable. Este elemento, según los desarrolladores, surgió del diálogo con usuarios reales y de observar cómo los dispositivos improvisados o de bajo costo no les ofrecen control suficiente en situaciones cotidianas.

El dispositivo también involucra un motor eficiente, una batería de autonomía prolongada, un sistema de sujeción resistente y materiales livianos que facilitan el uso sin añadir peso excesivo a la silla de ruedas. Estas decisiones técnicas se tomaron para garantizar que su fabricación sea viable y su mantenimiento sencillo, factores claves para que una innovación académica pueda convertirse en un producto útil para la comunidad.

El proyecto, además, abre la puerta a futuras mejoras. El sistema modular permite incorporar sensores adicionales, optimizar el diseño para producción en serie, ajustar el manubrio según la estatura del usuario e integrar tecnologías como indicadores de batería o sistemas de frenado más avanzados. La meta, según los docentes, es que este desarrollo pueda convertirse en una solución accesible de menor costo frente a los equipos importados que hoy dominan el mercado.