Señor Empresario
Resumen
Los primeros extranjeros llegaron a América hace más de 15,000 años desde Asia, seguidos por vikingos y finalmente Cristóbal Colón en 1492. Su llegada marcó el inicio de una era de colonización, explotación y cambios sociales que perduraron.
Generado por Inteliegenica Artifical (OpenAI)
Por: José Caicedo Solano*
A América, se cree, que vinieron los primeros extranjeros hace mas de 15.000 años, provenientes de Asia; luego aparecieron los Vikingos de los países nórticos de Europa, como son Suecia, Noruega, Finlandia y Dinamarca. Pero solo nos enseñaron que el “man” duro fue el italiano Cristóforo Columbus (Cristóbal Colon), patrocinado por España, con gran palanca de la reina Isabel la católica, quien dijo que hasta empeñaba sus joyas con un “majito querido”, (árabe), que no era turco, como se pensaba en Colombia, de los árabes que conquistaron a España y luego llegaron a Colombia, por Barranquilla. Pues este Cristóbal, sale de España un 3 de agosto de 1492 y llega a América un 12 de octubre de 1492, a la madrugada, a lo que hoy conocemos como las islas Bahamas. Después de esto, entra la invasión masiva de españoles, en lo que se llamó la época de la colonia, que no fue más que explotación y esclavitud y que se siguió, ya por los criollos, hasta muchos años después de la independencia del 7 de agosto de 1819.
Luego, con españoles o no, llegaron a Santander, “un jurgo” de daneses y alemanes, que se quedaron a vivir, sobre todo en la década de los años de 1800, y constituían “la alta sociedad de Santander y Bucaramanga”, con la aparición del Club de Soto, (del Comercio), y las grandes compañías mercantiles, que le daban por la cabeza a los artesanos que eran, lo hoy llamamos los microempresarios. Estos pequeños empresarios, ahogados económicamente y menospreciados por la alta élite, crean la asociación Pico de Oro, que los alemanes la llamaron despectivamente, La Culebra pico de oro, y así pasó a la historia, este movimiento que era acogido por los liberales de la época, en contra de los conservadores, que solo veían bien la elegancia y lo que se perfilaba como los “hombres de bien”, que eran los grandes hacendados y comerciantes.
Para septiembre de 1879, siendo presidente del estado soberano de Santander, Solón Wilches, con sede en el Socorro, se produce un estallido social en Bucaramanga, con muchos muertos, heridos, de parte de los alemanes y de los de la culebra pico de oro, hechos ocurridos en las calles de esta ciudad y en la propia iglesia de San Laureano. Sería tanto lo que mandaban los alemanes, que el imperio alemán exigió una indemnización para con sus conciudadanos, y amenazó con bombardear a Barranquilla, si no le pagaban.
Lo cierto es que Wilches, “voló” del Socorro a Bucaramanga, a presentarles excusas a los alemanes, les dio $750.000 pesos de la época, de indemnización y sonaron los 21 cañonazos como respaldo a los “señores alemanes”, en donde otros dicen que como arrodillados, a los extranjeros, por la misma psicología de considerarnos menos de los ciudadanos de afuera. Si bien, los alemanes hicieron comercio y una élite social se desarrolló, también se marcó un hecho histórico, que corresponde a la lucha de clases. Las señoritas bumanguesas, solo querían casarse con uno de esos 1.000 alemanes solteros que llegaron a la ciudad, muchos de ellos grandes en economía, pero perseguidos por la justicia de ese país. No todo lo que brilla es oro, quina o importaciones de máquinas alemanas, para un pueblo que no conocía sino el machete y el azadón.
*Contador Público. Asesor empresarial.