Ronald Araujo se aparta del Barcelona por tiempo indefinido para cuidar su salud mental: el club le brinda apoyo total

Ronald Araujo, capitán y uno de los líderes más sólidos del FC Barcelona, atraviesa uno de los momentos más delicados de su carrera. El defensor uruguayo solicitó al club un permiso indefinido para atender su salud mental, luego de varias semanas de presión acumulada que se intensificaron tras su expulsión en el duelo de Champions League frente al Chelsea. La institución azulgrana respondió de inmediato con un respaldo absoluto, poniendo todos sus recursos al servicio del jugador.

Según informó Mundo Deportivo, Araujo, de 26 años, llevaba tiempo sintiendo que no estaba en su mejor momento emocional. El episodio en Stamford Bridge, donde vio la tarjeta roja en un partido clave, no hizo más que profundizar ese estado de agobio. Aunque físicamente está en perfectas condiciones, el futbolista consideró que lo más honesto —tanto para él como para el equipo— era apartarse temporalmente para recuperar la estabilidad psicológica necesaria para competir al más alto nivel.

Desde el primer momento, la directiva del Barcelona mostró su apoyo sin condiciones. El presidente Joan Laporta, en compañía del director del área de fútbol Deco y del técnico Hansi Flick, le transmitieron al jugador confianza y tranquilidad. Laporta, desde Andorra, fue claro: el club no ejercerá ningún tipo de presión sobre fechas de retorno y le ha puesto a disposición apoyo profesional y acompañamiento permanente.

El entorno más cercano de Araujo también ha jugado un papel fundamental. Familiares, agentes y compañeros de vestuario le han ofrecido su respaldo, reconociendo su compromiso absoluto con el equipo, incluso en los momentos en que le tocó asumir roles poco habituales o aceptar suplencias sin objeciones. No en vano, pese a la dificultad del contexto, el uruguayo se mantuvo entregado a la dinámica del grupo, llegando incluso a marcar el gol decisivo ante el Girona semanas atrás.

En la previa del duelo frente al Atlético de Madrid, Hansi Flick confirmó públicamente la situación. “Ahora mismo no está preparado para jugar. Es una situación privada y el club le da todo el apoyo que necesita”, declaró el entrenador alemán, pidiendo respeto por el proceso personal del central y recordando que la prioridad es su bienestar.

La expulsión en Champions fue el punto de quiebre. Allí, bajo la mirada mundial, Araujo sintió cómo la presión se disparó. Pero lejos de esconderse, asumió su momento con profesionalismo, una actitud que sus compañeros valoraron con gestos de unidad dentro del vestuario.

Por ahora no existe una fecha prevista para su retorno. Araujo enfocará sus energías en recuperar la paz emocional que considera indispensable para rendir con la exigencia que demanda el Barcelona. El club, por su parte, ha sido enfático: la salud mental es una prioridad y el futbolista contará con total acompañamiento durante su proceso.

El caso de Araujo abre, además, una conversación necesaria en el deporte de alto rendimiento: la importancia de reconocer, atender y respetar los límites emocionales en un escenario donde la presión, la exposición y las expectativas suelen ser tan determinantes como el talento. En el Camp Nou, el mensaje es claro: el bienestar del jugador está por encima de cualquier resultado.