Presidente de Colombia es el jefe del paro nacional contra las instituciones
Resumen
La administración presidencial de Colombia enfrenta serias críticas por acciones que sabotean instituciones democráticas y favorecen al terrorismo y narcotráfico, en medio de llamados de protesta y anarquía.
Generado por Inteliegenica Artifical (OpenAI)
Con la vergonzosa entrega del gobierno al terrorismo internacional y al narcotráfico, el presidente de Colombia convocó a las organizaciones sindicales para protestar contra su propia administración, saboteando a las instituciones democráticas como el Congreso de la República y patrocinando a los grupos armados ilegales, en contra de la Constitución Nacional y de las Leyes de la República. Portándose como un enemigo de la patria, regresa a su pasado y ordena el desarme de la fuerza pública, convirtiendo a peligrosos criminales en ‘Gestores de Paz’.
Actuando como un desquiciado mental, el ex guerrillero del Movimiento Diecinueve de Abril (M-19) ha vuelto a sus antiguas andanzas, multiplicando la anarquía que ha sido el común denominador de su administración. Empeñado en convocar una ‘Consulta Popular’ para romperle el espinazo a nuestro ordenamiento jurídico, está perdiendo la batalla en la guerra contra el Congreso de la República, que le había servido de comodín para aprobar, al comienzo de su mandato, una de las mas costosas reformas tributarias que haya padecido el sector empresarial de Colombia.
Atrás quedaron los recuerdos de la sangre derramada durante la cruenta ‘Toma del Palacio de Justicia’ en Bogotá, donde murieron masacrados dieciocho (18) magistrados de las altas cortes. Jamás tanta sevicia y tanto odio se había cultivado en los Jardines del Palacio de Nariño, residencia oficial del ‘señor presidente de la República’, donde el otrora terrorista de la peor laya dedica su tiempo a multiplicar el odio contra los representantes de los gremios económicos y de los congresistas, que han sido colocados en la picota pública, en la sinuosa administración de este enfermo mental, que es capaz de destruir a Colombia.
La nación anda al garete, en manos de la esquizofrenia, que ofende a la nación y que ha puesto en peligro la salud de la patria. Como lo ha dicho el expresidente César Gaviria Trujillo, ‘en Colombia los bandidos se tomaron el poder, en alianza con peligrosas organizaciones sindicales, que están siendo utilizadas para perturbar el orden establecido, a cambio de dudosos privilegios laborales, mientras aumenta el desempleo y la falta de oportunidades para millones de compatriotas. ¡Colombia se está convirtiendo en un país INVIABLE, en un apéndice de los regímenes comunistas del mundo! En medio de la anarquía creada por el régimen que compró las últimas elecciones presidenciales, la patria se hunde en el laberinto de sus propias equivocaciones.