Suscribirse

Suscríbete a nuestro boletín

¡Éxito! Revisa tu correo

Para completar la suscripción, haz clic en el enlace de confirmación en tu bandeja de entrada. Si no lo recibes en 3 minutos, revisa tu carpeta de correo no deseado.

Vale, gracias

Los nuevos valores

Resumen

El artículo examina la crisis de valores en la sociedad actual donde la mediocridad es recompensada, el esfuerzo y la disciplina son desvalorizados y el relativismo moral impera, desvirtuando los valores clásicos en favor de nuevos ideales más permisivos.

Generado por Inteliegenica Artifical (OpenAI)
Leon Sandoval Ferreira profile image
by Leon Sandoval Ferreira

Por: León Sandoval Ferreira

La sociedad actual es una sociedad de antivalores, o quizás de nuevos valores que riñen con los valores de antaño. Los valores de pasado están fuera de contexto, per se resultan inconvenientes. Se encienden luminarias al mejor postor, se admira al bellaco, al contumaz y al tramposo, lo importante es escalar sin importar a costa de qué o de quién. Hay quienes desafían las leyes de la gravedad y caen de para arriba, otros dirán, caen parados. La justicia se convirtió en rey de burlas, todo se justifica y encuentra sentido a punta de “nuevas narrativas”, acepción con la que se justifican falsedades que quieren convertir en verdades.

Son tiempos en los que la disciplina, el esfuerzo, el trabajo, el mérito, el celo, el coraje, la fuerza, el rigor, la sabiduría pasan a segundo plano porque se impone la narrativa propia, la que cada quien desee construir. No hay unas cuántas éticas, hay una ética para cada quien. El relativismo moral prevalece, todo es aceptado y tolerado, bajo argumentos falaces apoyados en la libertad avenida en libertinaje y el progreso distorsionado en progresismo. Deben revaluarse la cadena de valores vigente que tiene eslabones que antes de ser rutilantes son cieno. Existe una elasticidad ética, si el término aplica. Todo se vale, todo se puede, todo es permitido; no hay problema con el hecho de que los líderes profesen valores que distan mucho del ideal griego clásico de la virtud. Esta última escasea.

Se le rinde culto a la inconstancia, al fanatismo, a la blandura, a la debilidad, al lloriqueo y a la falta de carácter. Bien lo sentenció un célebre premio Nobel “Sólo los idiotas no cambian de parecer”. Todo es válido. El triunfo no importa, porque todos son ganadores, organizan eventos atléticos con medallas para todos, olvidaron que después del primero todos son perdedores. La ética imperante: Todos tienen derecho a todo, así no tengan mérito para ello, por eso hoy duele más la muerte del delincuente que la del policía. En las escuelas nadie reprueba porque todos tienen que aprobar, el problema no es del alumno, es del docente que no logra que el desjuiciado aprenda. “Lo que Natura no presta, Salamanca no da” no opera en estos tiempos.  De allí que la mediocridad se haya enquistado y se ataque al sobresaliente. La meritocracia es mera retórica. El más bulloso, el más llorón, el que se victimiza, ganan.

Se confunde lo masculino con lo femenino, los muchachos de las nuevas generaciones son feminizados, mientras muchas jóvenes se virilizan. El vigor físico y mental no son relevantes, porque ser débil y flojo es virtud. Abundan los veinteañeros mantenidos por su parentela que no lavan un plato en casa, que jamás recibieron un fuetazo porque eso iba en contra de su dignidad ¿Qué de bueno le espera al mundo con jóvenes cuyo sentido de la vida es el placer de estar echados en un sillón pegados a un videojuego?

Razón tenía quien dijo que los tiempos difíciles crea hombres duros, y los tiempos fáciles crean hombres débiles. Hablar con propiedad, con firmeza, decir la verdad resultan lesivos y sin empatía. Los profesores se volvieron recreacionistas que no pueden exigir a sus estudiantes porque los trauman. Una sociedad con tanta gente débil no podrá jamás prosperar. Hay muchachos que duermen hasta las 10 u 11 de la mañana y se despiertan a pedir desayuno para seguir con la siesta. Así es imposible creer en un futuro mejor.

Las mejores generaciones sin lugar a duda fueron las de los nacidos en las tres cuartas partes del siglo XX. Quizás son las mejores de la historia con todo y guerras permanentes.

Leon Sandoval Ferreira profile image
por Leon Sandoval Ferreira

Subscribe to New Posts

Lorem ultrices malesuada sapien amet pulvinar quis. Feugiat etiam ullamcorper pharetra vitae nibh enim vel.

¡Éxito! Revisa tu correo

To complete Subscribe, click the confirmation link in your inbox. If it doesn’t arrive within 3 minutes, check your spam folder.

Vale, gracias

Leer más