Legalización de 47 asentamientos para beneficio de diez mil personas
Mesas de trabajo para lograr escriturarlos como barrios legítimos
El municipio de Bucaramanga enfrenta un desafío crítico, porque 47 asentamientos urbanos carecen de la legalización de predios y esa situación convierte a miles de familias en habitantes sin derechos plenos ni acceso a beneficios básicos.
Miles de hogares permanecen fuera del perímetro oficial, porque sin escrituras no acceden a programas de mejoramiento de vivienda, tienen precarización en servicios públicos, no participan en la planeación territorial, no obtienen créditos ni formalizan su patrimonio.
El Municipio presentó la Política Pública de Legalización de Barrios, pero no hay una gran ilusión entre los habitantes de los sectores que aún están sin legalizar, porque guardan recelo frente a las promesas incumplidas.
Esperan el ‘milagro’
La mayoría de estos barrios llevan décadas a la espera del ‘milagro’ pero sólo se reciben promesas políticas y nadie ha intentado, al menos, empezar a planificar y a diseñar el proceso de registro oficial.
La Política Pública de Legalización de Barrios busca reconocer la realidad de los asentamientos que carecen de legalidad, otorgándoles seguridad jurídica, la instalación de servicios públicos como agua, energía y gas, para mejorar las condiciones de vida.
Así mismo, se enfoca en una mejor planificación urbana, para evitar la expansión desordenada, promueve un desarrollo sostenible y abre la puerta a la inversión en infraestructura y desarrollo social.
Algunos asentamientos se ubican a pocos metros del río de Oro. Allí, las familias enfrentan peligro por desbordamientos y derrumbes. Aun así, se construyen viviendas de varios niveles sin garantías de infraestructura.