Holly Jane, la exmormona de OnlyFans que desafía los límites de la fe
Durante años, Holly Jane vivió en una aparente armonía entre su rol de madre, devota mormona y miembro activa de la Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días. Sin embargo, detrás de las puertas de su hogar tejía una vida paralela: vendía contenido para adultos en la plataforma OnlyFans, generando ingresos mensuales que superaban los miles de dólares. El descubrimiento de esta doble vida, en 2022, provocó su excomunión y un cambio radical en su existencia.
A los 42 años, Holly decidió romper el silencio en una entrevista con el Daily Mail, en la que criticó abiertamente la cultura de su antigua iglesia, a la que acusa de imponer normas tácitas que reprimen la autonomía y la sexualidad, especialmente en las mujeres. “La modestia no es solo sobre la ropa, también es sobre cómo caminas, cómo hablas. Te exigen caber en una caja invisible de lo ‘apropiado’, o te conviertes en una rebelde”, aseguró.
Impulsada por la necesidad económica y un deseo de reconectar con su cuerpo, Holly creó contenido erótico de forma anónima mientras aún asistía a la iglesia. Pero cuando miembros de su congregación descubrieron su perfil, la reacción fue inmediata: rechazo, juicio y una expulsión formal. “Sentí que todo lo que di no valió nada. Las personas que pensé que eran mi comunidad simplemente desaparecieron”, relató.
Actualmente, Holly vive en Texas, donde continúa asistiendo a misa, aunque no puede participar de los rituales religiosos. A pesar de su excomunión, afirma que sigue creyendo. “No he perdido mi fe, pero tampoco voy a pedirle permiso al obispo para vivir mi vida”, dijo. Para ella, OnlyFans no es un desvío moral, sino un espacio de empoderamiento: “Lo veo como un llamado”.
Además, cuestiona la doble moral dentro del mormonismo. Denuncia que mientras a ella la expulsaron por mostrar su cuerpo, hay otros miembros —incluso influencers— que participan en prácticas como el soft-swinging sin enfrentar sanciones. “La hipocresía está en quiénes deciden castigar y a quiénes eligen proteger”, enfatizó.
La historia de Holly Jane no solo expone la tensión entre religiosidad y libertad individual, sino también las complejidades de vivir en una sociedad donde la espiritualidad y la autonomía personal aún se sienten como fuerzas opuestas.
