El piano como protagonista
Resumen
La exposición 'Irreverencial' de Ricardo Orduz en la Universidad Industrial de Santander honra al piano como instrumento de conexión entre la ciudad, el campo y la vida. Con un enfoque visual y auditivo, este evento ofrece una experiencia introspectiva única.
Generado por Inteliegenica Artifical (OpenAI)
Durante agosto, los amantes del arte podrán apreciar, en las Salas Rafael Prada Ardila y Gustavo Gómez Ardila de la Universidad Industrial de Santander, una impecable exposición, titulada Irreverencial, del maestro Ricardo Orduz, en la que el instrumento que honra el Festival Internacional de Piano se asume como una figura que genera conexiones con la ciudad, el campo, Latinoamérica, la transición entre la vida y la muerte, el blanco y el negro y un sinfín de emociones, que lleva a los espectadores a realizar viajes introspectivos y a generar diálogos con cada una de las obras, tanto pictóricas como escultóricas, que hacen parte de esta muestra individual.
Además de la fuerza argumental que posee toda la exposición, los visitantes podrán encontrar un texto curatorial, escrito por el artista y gestor cultural Walter Gómez, que acompañado de un epígrafe de la poetisa Andrea Jaimes, permite ahondar en la propuesta del maestro Orduz, en la fuerza del color, en la poesía, en la musicalidad y en la armonía que ofrecen las piezas, pues, como se afirma en el documento: «Irreverencial es un conjunto de obras elaboradas desde el desacato a la pesadumbre del tiempo. Un desdén al orden y lo establecido. Un proceder incierto, un gesto vital ante el encuentro de cada descubrimiento».
Con una variedad de técnicas, que van desde la lámina de hierro y pintura electrostática, mixta sobre tela, impresión, lámina de hierro y pintura automotriz, entre otras, la exposición se ofrece como un puente para percibir el piano desde diferentes dimensiones, generando un contacto más cercano y vinculándolo con espacios convencionales e imaginarios, en los que sus formas geométricas, perfectamente, podrían trazar planos urbanos y ámbitos rurales, en donde las posibilidades son infinitas.
Irreverencial, de Ricardo Orduz, es una oda al piano, una experiencia visual, en la que música es protagonista a través de la mirada íntima de un arquitecto, quien, en su labor de artista, devela en este instrumento una forma de comunicación que va más a allá de una interpretación musical. Es, en realidad, un encuentro consigo mismo, una experiencia con el otro, a la luz de la geometría, la abstracción, lo figurativo y la capacidad de hallar en el detalle la grandeza de la creación.
*Docente de la Universidad Industrial de Santander