¿A qué viene el presidente Petro? ¡Acaso existen obras para inaugurar!
Resumen
El presidente Petro llega a Bucaramanga buscando reconciliación en su antiguo bastión rebelde. Su gobierno enfrenta críticas por sus alianzas internacionales y acusaciones contra líderes regionales como el gobernador de Santander.
Generado por Inteliegenica Artifical (OpenAI)
Cansado de recibir a los jefes y voceros de los grupos narcoguerrilleros y bandidos de todos los pelambres, por cuenta de la política de ‘LA PAZ TOTAL’, aterriza en Bucaramanga el señor presidente de la república, Gustavo Petro Urrego, que prometiera un día ‘acabar con la oligarquía liberal y conservadora’, como era su propósito durante su permanencia en las filas de las guerrillas del Movimiento Diecinueve de Abril (M-19), antes y después de la amnistía y el indulto que le concedieran los gobiernos de Misael Pastrana, Virgilio Barco Vargas y César Gaviria Trujillo.
Se dirá que viene el doctor Gustavo Petro a reconciliarse con los pueblos donde trascendió su vida rebelde, como Bucaramanga, Barrancabermeja y Girón, donde estuvo oculto varios años mientras algunos de sus seguidores ordenaban el sacrificio del líder sindical José Raquel Mercado, que estuvo secuestrado en estas tierras y que fue juzgado por una supuesta traición a la clase trabajadora.
Quiere ahora, en el ocaso de su agitada vida rebelde, realizar el apostolado de entregarle a las familias pobres de Santander los ‘bonos pensionales’ para nuestros abuelos asilados en centros de la tercera edad y la oportunidad de una vida digna, pidiéndole perdón a sectores de la activad productiva, que lo han padecido a punta de reformas tributarias, si es que el Congreso de la República sigue agachado esperando que caigan de la ‘Mesa del Rico Epulón’ las migajas de la picaresca contratista que le ha causado enorme daño a la nación.
Las alianzas del gobierno de Colombia con la dictadura venezolana de Nicolás Maduro Moros han puesto en peligro la seguridad continental. Haber suspendido las relaciones diplomáticas con la república de Israel, que era uno de los principales proveedores de armamento para combatir a los grupos terroristas, cuando comenzaba la nueva guerra de la Franja de Gaza en el Medio Oriente ha mostrado a Colombia como un satélite de los regímenes comunistas del mundo, lo que merecería una aclaración y una rectificación en este momento, cuando Colombia debe empuñar las armas de la República para acabar con los grupos de bandidos que están avanzando en la toma territorial de varios departamentos del país, ante la mirada complaciente de los ‘falsos amigos’ del señor presidente.
Ha sido considerada como una inequidad la reciente declaración del presidente Petro acusando al gobernador de Santander, Mayor General (MGR) Juvenal Díaz Mateus, como presunto responsable de una conspiración para derrocar al mandatario de los colombianos, que administra sus dudas y sospechas, cada que encuentra en el camino a algún líder nacional que le pueda hacer estorbo en su afán de convertirse en dictador. Y aunque el gobernador de Santander haya desvirtuado estas temerarias afirmaciones, ha quedado en el ambiente la duda de que el presidente Petro no quiere rivales que puedan emularlo sino líderes arrodillados, al servicio del ‘Príncipe’.
El departamento de Santander tiene un líder de talla presidencial que es el Mayor General (MGR) Juvenal Díaz Mateus, que merece el respeto de la nación y quien ha tenido que sufrir la conducta displicente del gobierno nacional, cerrándole las puertas a la entrega de transferencias de la nación para las obras públicas. Tenemos las peores carreteras del país porque al gobierno del doctor Petro no le interesan las obras sino los pleitos.